Onda, conocida por su industria azulejera y hortofrutícola, el municipio de Onda descansa al abrazo de la Sierra de Espadán y la llanura de la Plana, bañada por los ríos Mijares y Sonella. Su excepcional ubicación hizo de esta población un punto estratégico de la provincia de Castelló que se materializó con la presencia de un imponente castillo.

Sus angostas calles imprimen historia a cada rincón y plazas con encanto, las mismas en las que se entremezcla el olor de sus característicos pinos y algarrobos. Además, Onda invita a disfrutar del turismo accesible, facilitando a las personas con capacidades diferentes disfrutar de paseos que evitan las barreras urbanísticas y arquitectónicas. 

De hecho, la localidad dispone de una Oficina Municipal de Turismo con un mostrador adaptado para atender a personas con movilidad reducida, desde la que se ofertan visitas guiadas para personas con ceguera. Y es que, visitar Onda es vivir una experiencia multisensorial al perderse y admirar sus monumentos y edificios, como el Castillo de las 300 Torres, el Molí de la Reixa o el Museo del Azulejo.

Castillo de las 300 Torres

Declarado Conjunto Histórico-Artístico y Bien de Interés Cultural en 1967, el Castillo de Onda, conocido como Castillo de las 300 Torres, se erige magnánimo en la localidad desde hace más de diez siglos. Es uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad y una de las primeras fortalezas accesibles de la provincia. La reciente instalación de una rampa conecta el Museo de Historia y Arqueología Local del Albacar, en el interior del Castillo con la Alcazaba.

Los informadores turísticos realizan visitas gratuitas por su interior, ofreciendo la proyección de un audiovisual adaptado al lenguaje de signos con subtítulos con el objetivo de hacer llegar a todos los visitantes el valor de este importante recurso patrimonial de Onda.

Molí de la Reixa

El Molí de la Reixa, una imponente construcción de tres plantas que antaño sirvió de molino de harina, es testigo de la época industrial del siglo XVII. Tras la restauración de algunas de sus piezas más icónicas en el año 2010 y la adquisición de nuevas reliquias, el edificio puede visitarse para conocer el funcionamiento de los molinos de aquella época.

Actualmente, el Molí de la Reixa se ha reconvertido en el Centro de Interpretación de la Naturaleza, cuyo interior alberga una de las colecciones más completas de paleontología y mineralogía. Así, difunde la historia del agua y del Parque Natural de Sierra Espadán, el más grande en extensión de la provincia de Castelló y el segundo de la Comunitat Valenciana.

Un edificio histórico que, además, cuenta con una rampa de acceso y ascensores que hacen de esta emblemática construcción, así como del conocimiento que atesora, un espacio completamente accesible.

Museo de Ciencias Naturales “El Carmen”

El municipio de Onda, cuyo paisaje se viste de encimas, alcornoques, madroños, olivos, almendros y naranjos, posee una rica biodiversidad que puede admirarse en el Museo de Ciencias Naturales “El Carmen”. Los visitantes podrán contemplar más de 2.000 especies de mamíferos, aves, peces, reptiles, crustáceos e, incluso, batracios, así como cerca de 1.000 especies en la sección de entomología. Esta variada colección se completa con más de 1.500 plantas, 2.000 minerales y 500 fósiles, aproximadamente.

La muestra también incluye el mismo volumen de unidades en la sección de malacología, así como una importante colección de más de 6.000 mariposas. Todo un universo repleto de vida y diversidad que se pone a disposición de todas aquellas personas que quieran conocer la historia de Onda a través de su riqueza natural de forma completamente accesible, pese a ser un edificio con más de 60 años de antigüedad.

Museo del Azulejo “Manolo Safont”

El municipio castellonense destaca, entre otros aspectos, por su consolidada industria azulejera. El Museo del Azulejo “Manolo Safont” es el máximo exponente del potencial cerámico de Onda. Su interior muestra al visitante la historia y valiosa tradición industrial a través de los más de 80.000 objetos que alberga en el interior de un edificio moderno.

El mismo que se ha adaptado a las personas con diversas capacidades para hacerlas partícipes de un interesantísimo paseo por la evolución del azulejo, desde las baldosas romanas hasta la azulejería inteligente del siglo XXI, ejemplificando sus diferentes usos, aplicaciones y cuidado proceso de producción.

Riqueza gastronómica

Si hay un elemento eminentemente típico de un territorio es su gastronomía. A través de recetas y productos se puede conocer no solo la identidad de una localidad, sino también su desarrollo social y económico a través de sus cultivos y mercados municipales. Así, la oferta gastronómica de Onda destaca por su cuidada elaboración y materias primas de gran calidad siguiendo los pasos de recetas ancestrales que se nutren de la influencia de las culturas que han impregnado la localidad. 

Entre sus productos estrella, el arroz es el gran protagonista. Parte imprescindible de característicos platos como arroz “viudo” o “arròs passejat”, comparte popularidad con la Olla de Onda. Se trata de un guiso tradicional elaborado con productos autóctonos como patata, espinacas, coles, acelgas, cardos y calabazas, una mezcla se sabores y texturas cocinadas a fuego lento. 

Para aquellas personas más golosas, la repostería de Onda ofrece auténticas delicias como las “pilotes de Frare”, las “coques malfetes” o las “llesquetes amb ous”. 

Toda una amplia gama de recetas y alimentos que han llevado a la localidad a convertirse en un referente autonómico de los fogones, celebrando incluso su propia Feria Gastronómica.