Asentado en la falda de la Sierra del Cabeçó d’Or, el municipio alicantino ofrece todas las comodidades en un entorno único.

Pasear tranquilamente por sus calles, disfrutar de las vistas privilegiadas que ofrece la Sierra del Cabeçó d’Or o contemplar un atardecer en un entorno único, a medio camino entre la montaña y el mar.
Todo esto, que formaría parte del viaje soñado de cualquier persona, está más cerca de lo que parece. Concretamente, en Busot, un pequeño municipio alicantino asentado en la falda de la Sierra del Cabeçó d’Or (1.205 metros). Esta localidad puede convertirse en el destino ideal para cualquier escapada, en contacto directo con la naturaleza y con una gran oferta de actividades al aire libre.
¿Quieres disfrutar de unos días de desconexión al aire libre? Busot cuenta con múltiples atractivos turísticos en su término municipal que potencian el desarrollo de actividades al aire libre. Para los amantes de las aventuras y la naturaleza, la localidad cuenta con las famosas Cuevas del Canelobre, que reciben más de 60.000 visitas anuales. Se trata de una espectacular gruta de más de 800.000 años que constituye una de las bóvedas subterráneas más altas de España, con 70 metros. El agua y la roca han dado lugar a impresionantes formas como estalactitas, estalagmitas, columnas y medusas.
También puedes visitar la Sierra del Cabeçó y realizar excursiones por ella para disfrutar de la inmensidad de su paisaje, a la vez que su clima suave y soleado. Entre las actividades de montaña que se pueden llevar a cabo en esta sierra destaca la práctica de escalada (con cientos de itinerarios), las tres cavidades de interés espeleológico y un sinfín de senderos y pistas para practicar senderismo y bicicleta de montaña.
Sin embargo, lo más destacado es su rica gastronomía: la Olleta con perdiz, el gazpacho de pollo y conejo, el suquet de peix, la pericana… son, sin duda, un buen motivo para visitar la localidad, además de sus singulares dulces, como la tortada de almendra.

Por último, la localidad ofrece una nueva actividad lúdica para todas las familias y edades. Se trata de El Tesoro de Busot, un juego en forma de yincana que consiste en un recorrido urbano por los principales recursos del municipio, al mismo tiempo que se superan pruebas, retos y desafíos. Con la superación de los retos, los participantes ganan una serie de puntos que, posteriormente, pueden canjear por promociones, descuentos en comercios y restaurantes locales o regalos.
Hay tres modalidades diferentes de juego, ordenadas por su dificultad: historiados, explorador y aventurero. Las dos primeras transcurren por el centro de Busot, mientras que la última consiste en un recorrido de naturaleza que incluye una ascensión al Cabeçó d’Or.
Rico patrimonio histórico-cultural
Busot también es historia. A su origen musulmán le debe la construcción de su antiguo castillo, en el que se inició la tradicional industria local del vidrio, actualmente desaparecida. Los restos del castillo son uno de los atractivos turísticos más destacados a día de hoy en Busot, así como el monumento de la Ermita de San José o la Parroquia de San Lorenzo Mártir.
Todo ello forma parte de su rico patrimonio histórico, aunque también cultural, que se completa con su Museo de Música Étnica. Este centro, inaugurado en 2015, presume de una exquisita muestra de instrumentos de todas las épocas, culturas y rincones del mundo. Además, la colección del musicólogo Carlos Blanco Fadol, ayuda a sus visitantes a comprender mejor la evolución de esta manifestación ancestral.
